Este evento se desarrolló como parte de una agenda regional para impulsar la integración de MiPymes y cámaras de comercio “para facilitar la realización de negocios”, de acuerdo con información suministrada a EFE, por el presidente de la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB) y de la Federación Mundial de Cámaras de Comercio, Nicolás Uribe Rueda.

En esta primera edición, participaron representantes de 22 países como Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Costa Rica, Ecuador, España, Estados Unidos, Guatemala, México, Panamá, Perú y Venezuela, y miembros de 30 cámaras de comercio internacionales.

”La cumbre culminó con un ejercicio de fortalecimiento para las cámaras de comercio, con el programa de innovación del negocio”, manifestó Uribe Rueda.

Cabe destacar que los espacios de aprendizaje y de intercambio de experiencia con ejes principales de innovación y sostenibilidad permitieron que líderes empresariales de Colombia tuvieran la oportunidad de conectar con homólogos de diversos países y panelistas internacionales.

Asimismo, Uribe manifestó que «Bogotá genera el 60 % de las startups de Colombia y aquí se concentra una gran actividad alrededor de los temas de emprendimiento», dijo.

Sin duda, fue esta una oportunidad perfecta para visibilizar a Colombia y Bogotá como un punto de llegada de inversión, además de un espacio propicio para la realización de eventos de esta magnitud y concentrar al ecosistema de innovación y emprendimiento.

Y aunque aún hay mucho por hacerse en materia de sostenibilidad, el servir de anfitrión para este tipo de eventos en nuestro espacio geográfico es una oportunidad para seguir sensibilizando a las compañías locales en la importancia de trabajar por la erradicación de las problemáticas más importantes para la región.

Entre los días 3 y 4 de noviembre, también se estará celebrando el 12° Congreso Nacional de Responsabilidad Social – «Megasostenibilidad”. Este evento, tal y como la cumbre del pasado mes de octubre, pretende poner en la brújula de las compañías colombianas la importancia de trabajar bajo los parámetros de la ética para entregar valor intrínseco a la economía, la sociedad y el medio ambiente.

Sin embargo, pocos esfuerzos se están llevando a cabo realmente para llevar conciencia a las empresas. Estudios hechos por nuestros expertos de Akademy50 sugieren que tan solo 1 de cada 2.000 profesionales están hoy en día listos para trabajar en pro del triple impacto, social, ambiental y económico, siendo este último el único al que realmente se le ha dado relevancia dentro de las organizaciones para seguir moviendo sus marcas.